25 abril 2013

Capítulo IV - honey moon


Y empezó el juego de palabras con tu nombre. 
Todo era un juego.
Me sentía tan feliz cuando tu nariz tocaba mi cuello.
Y cuando mis labios tocaban tu nariz.
Todo era nuevo aunque no lo fuera.
Los problemas no eran problemas.
Porque yo estaba ahí.
Tú estabas ahí.

El primer cumpleaños al hilo telefónico, 
revolviendo cielo y tierra para buscar una tontería.
El miedo de tus lágrimas.
Una piscina extraña con bikini ajeno.
El calor de las calles.
Una comida sin soltarnos las manos.
Contarnos los sueños.

Soñar cuentos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario